miércoles, 16 de diciembre de 2009

De mí misma


¿Quién te dijo, quién te cuenta?
¿Desde dónde... hasta dónde?
¿Cómo, desde cuándo?
¿Cuánto me conocés?
¿Qué sabés de mi?
Porque no ves cuando lloro y muerdo la almohada, muerta de miedo
porque no ves mi mirada frente al espejo, evasiva y disconforme
porque no ves mi forma de ansiar, cuestionar y maldecir al amor que nunca llega
porque no ves mis brazos alrededor de mis piernas y mi cabeza hundida en ellas
porque no ves la fuerza que hacen mis manos entre las sábanas
porque no ves mi placard inundado de máscaras grotescas
porque no ves mi realidad objetiva, ni mi verdad subjetiva.
Porque no ves.

Y relajadamente decís que me conocés tanto más que yo misma.
Increíblemente increíble tu falaz convicción.
No ves realidad, ni verdad, ni nada.
Porque yo sigo optando que así sea.
Por Dios... que así sea.

1 comentario: